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Primera fundación de San Miguel de Tucumán en Ibatín

La primera fundación de San Miguel de Tucumán se llevó a cabo el 31 de mayo de 1565 en Ibatín, Comuna de León Rougés, Departamento de Monteros, Provincia de Tucumán. Si bien en sus inicios la ciudad era una aldea fortificada con algunos ranchos de paja, hacia finales del siglo XVI inició un rápido proceso de desarrollo y en las primeras décadas del siglo XVII contaba con elegantes casas, numerosas iglesias pertenecientes a las distintas órdenes religiosas y un ambiente dinámico propio de un centro comercial activo. En 1685 se traslada la ciudad al sitio de la Toma debido a una confluencia de factores que determinaron que los habitantes empezaran a abandonar la ciudad que se había convertido en un lugar malsano, con una mínima actividad económica.


Causas que determinaron el abandono de la ciudad

En 1685 se traslada la ciudad al sitio de la Toma como consecuencia de numerosas circunstancias. Por un lado, los cambios en la corriente del río Tejar y sus sucesivas crecidas arrasaron con todas las viviendas del norte de la ciudad y generaron condiciones insalubres de habitabilidad. Por otra parte, la fundación de la ciudad de Esteco generó un nuevo camino que comunicaba el Perú sin pasar por los Valles Calchaquíes. Este camino se impuso definitivamente luego del tercer y último Gran Levantamiento Diaguita – Calchaquí (1656-1659). La ciudad se convirtió en un lugar malsano, con una mínima actividad económica y sin perspectivas de cambios los habitantes empezaron a abandonarla. La mudanza generó una fuerte controversia entre los bandos que estaban a favor y en contra. En 1680 el rey de España emite una cédula real ordenando el traslado, que se concreta 5 años después por la puja de bandos.


La situación actual del sitio arqueológico

Tras más de trescientos años la ciudad quedó expuesta a la acción del tiempo y los edificios se convirtieron en montículos de tierra a causa del derrumbe de las paredes. La densa vegetación de la Yunga volvió a cubrir el sitio y varias hectáreas fueron usurpadas con fines agrícolas. Si bien hubo algunos intentos de revalorización, actualmente el sitio se encuentra en situación de gran fragilidad. Recientemente las ruinas pasaron a manos de la Dirección de Patrimonio Cultural de la provincia de Tucumán, que dispuso la creación de un Museo Arqueológico a Cielo Abierto en el sitio.


La Reconstrucción Virtual

El presente trabajo consiste en una reconstrucción virtual de la Primera Fundación de San Miguel de Tucumán en Ibatín en el momento de apogeo de la ciudad alrededor del año 1630. El proceso se llevó a cabo por medio de una investigación multidisciplinaria a partir de las escasas evidencias físicas existentes, un exhaustivo estudio bibliográfico, entrevistas a informantes claves e inferencias comparativas, que concluyeron con la elaboración de hipótesis de reconstrucción virtual a partir de las cuales se construyeron los modelos tridimensionales.


Características urbanas

Ibatín respondía a las pautas típicas de la ciudad hispanoamericana. Consistía en un cuadrilátero de 7 por 7 manzanas, de 166 varas (138,76 metros) de lado, de las cuales la central se reservó para la plaza pública. Las calles tenían un ancho aproximado de 12 varas (10,03 metros). Las manzanas se dividían en cuatro solares de casi media hectárea cada uno. Más allá de la traza urbana se encontraban los ejidos donde se ubicaban las chacras y estancias, destinadas a los cultivos y cría de animales para abastecer la ciudad.


Conformación del tejido urbano

Una vez localizados los solares correspondientes a las iglesias y el cabildo, el resto del tejido urbano estaría conformado por viviendas y solares vacíos. A partir de bibliografía especializada se elaboraron tipologías de viviendas en función de su organización funcional, dimensiones y materiales utilizados: construcciones precarias de embarrado y paja o viviendas de tapia con techos de paja o teja, en tira sobre línea municipal o en tira con patio delantero, en “L”, en “U” o de 4 lados, las que además, según su jerarquía, contaban con volúmenes destinados a los servicios. En base a lo investigado, se deduce que la estratificación social típica de la época se habría reflejado en la distribución de los solares. La clase dirigente, constituida por la élite adinerada, recibió solares alrededor de la plaza principal, lo que, en forma conjunta con las fachadas de sus viviendas, denotaba su estatus social. La clase servil, el mayor porcentaje de la población, compuesta principalmente por indios, habitaba en las casas donde servía, en construcciones especialmente destinadas para tal fin. La clase media, constituida por los artesanos, mayormente indios independizados dueños de un oficio y una casa propia, se instaló en un barrio al sur de la ciudad. En base a lo anteriormente expuesto, las tipologías de viviendas se distribuyeron por los solares de la ciudad siguiendo el siguiente criterio: anillo (1) con una densidad de ocupación de solares alta y viviendas de mayor categoría, anillo (2) de densidad media y un porcentaje alto de viviendas de categoría media y anillo (3) de densidad baja y mayormente viviendas de baja categoría. Además se tomó como referencia un plano catastral de los propietarios de viviendas y solares realizado por Luis Monti.


La plaza

La plaza era un amplio espacio cuyos límites estaban dados por las viviendas de los vecinos principales, el cabildo, la Iglesia matriz y la Iglesia de los Jesuitas. Constituía el núcleo generador de la urbe, donde se manifestaban las expresiones más características de la vida colonial, las actividades comerciales, cívicas y religiosas. En el centro se encontraba el rollo o picota de la justicia donde se ejecutaba o azotaba por delitos.


El Cabildo

El Cabildo, al ser un edificio principal, se ubicaba frente a la plaza. La precariedad de las ciudades coloniales en sus primeros años determinó que, aunque los cabildantes debían reunirse igual, los edificios tardaran en construirse. Ibatín no fue la excepción, los funcionarios no contaron con un edificio para sus reuniones semanales hasta 1608, momento en que el Estado adquiere una casa que había pertenecido a Ceballos Morales. Según las excavaciones arqueológicas y la bibliografía consultada tenía 40 metros de frente y 35 metros de fondo. Contaba con un patio central pavimentado con piedra bola rodeado de habitaciones. El techo estaba cubierto de tejas. Para elaborar la hipótesis de reconstrucción virtual se utilizó la planimetría de Gramajo Martínez (1976) resultante de las escasas excavaciones arqueológicas realizadas en el sitio, los datos aportados por la bibliografía específica de Ibatín e inferencias comparativas con viviendas de la misma época.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)

(3) El sitio en la actualidad. Fotografía: Luis Monti


Iglesia matriz

La Iglesia Matriz se ubicaba en la esquina sureste de la plaza principal. Según la bibliografía consultada era un templo de una única nave con un apéndice a la altura del altar, de 10 metros de ancho por 50 de largo, precedido por un amplio atrio. Construida en anchos muros de adobe sobre cimientos de canto rodado y techo a dos aguas sobre vigas de madera. En esta iglesia, de carácter popular, solicitaban ser enterrados personajes de distintos estratos sociales. Para elaborar la hipótesis de reconstrucción virtual se utilizó la planimetría de Gramajo Martínez (1976) resultante de las escasas excavaciones arqueológicas realizadas en el sitio, los datos aportados por la bibliografía específica de Ibatín e inferencias comparativas con iglesias contemporáneas.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)

(3) El sitio en la actualidad. Fotografía: Luis Monti


Iglesia y Colegio de la Compañía de Jesús

Se ubicaba en la esquina noroeste de la plaza. Este templo se caracterizó por una permanente preocupación por la evangelización de los naturales con los que tenía una estrecha relación. Según la bibliografía consultada era un templo de una nave con crucero, de 10 metros de ancho por 40 de largo, precedido por un atrio de 12 metros. El edificio se encontraba a la izquierda de un patio, alrededor del cual se edificaba el colegio y el claustro de la compañía. Construida en paredes de adobe o ladrillo, piso de baldosa cerámica y techo de tejas. Para elaborar la hipótesis de reconstrucción virtual se utilizó la planimetría de Gramajo Martínez (1976) resultante de las escasas excavaciones arqueológicas realizadas en el sitio, los datos aportados por la bibliografía específica de Ibatín e inferencias comparativas con iglesias jesuíticas contemporáneas.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)

(3) El sitio en la actualidad. Fotografía: Luis Monti


Iglesia y Convento de San Francisco

La iglesia de San Francisco no fue excavada, por lo tanto, no se conocen sus características. Sí se pudo verificar a través de documentos coloniales su ubicación, que coincidía con la del traslado a La Toma. Según la bibliografía, se gastó una importante suma de dinero en su construcción. Solicitaban ser enterrados allí los vecinos hacendados más acaudalados de la ciudad. Tenía una capilla anexa solicitada por Diego Graneros de Alarcón, un vecino hacendado. Para su reconstrucción virtual se elaboró una hipótesis que consideró las características espaciales y constructivas de iglesias de la misma época y especialmente de la Iglesia de San Francisco en la ciudad de Santa Fe la Vieja.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)

(3) El sitio en la actualidad. Fotografía: Luis Monti


Iglesia y Convento de La Merced

La orden mercedaria fue la primera en llegar a la ciudad levantando su templo en el año 1586. Aparentemente en los primeros años del siglo XVII algunos miembros de la élite solicitaban ser enterrados allí, hasta que tiempo después se impuso la costumbre de solicitar el entierro en San Francisco. Según la bibliografía consultada era un templo de una nave contigua al convento, de 10 metros de ancho y 40 metros de largo, precedido por un gran atrio. Estaba emplazado en un amplio espacio abierto rodeado de muros levantados frente al templo. En cuanto a sus características constructivas tenía techo de tejas asentado sobre tirantería. Para elaborar la hipótesis de reconstrucción virtual se utilizó la planimetría de Gramajo Martínez (1976) resultante de las escasas excavaciones arqueológicas realizadas en el sitio, los datos aportados por la bibliografía específica de Ibatín e inferencias comparativas con iglesias contemporáneas.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)

(3) El sitio en la actualidad. Fotografía: Luis Monti


Ermita de los Santos Judas y Simón

Se encontraba a tres cuadras de la plaza. Era pequeña en relación a las iglesias, tenía aproximadamente 120 metros cuadrados. Según la bibliografía consultada estaba construida en paredes de adobe o ladrillo, techo de tejas y contaba con umbrales y dinteles de madera tallados.

(1) Reconstrucción virtual

(2) Grado de evidencia arqueológica. Tabla Bizantium (Aparicio Resco y Figueiredo, 2016)


Viviendas

En los inicios no eran más que ranchos de adobe con techos de paja y pisos de tierra. Con el correr de los años fueron apareciendo viviendas de “lujo” que se caracterizaban por tener paredes de adobe o en menor medida de ladrillo, techos con tirantes de madera y cubierta de teja, pisos de baldosa cerámica o piedra bola, amplios patios rodeados de galerías, cómodos aposentos, áreas de servicio y al fondo corrales y huertas. El patio era el centro de la vivienda y el ámbito donde se desarrollaban la mayoría de las actividades cotidianas. A partir de la bibliografía consultada se elaboraron tipologías de viviendas en función de la jerarquía, la disposición espacial y los materiales utilizados.

(1) Rancho de embarrado con techo de paja y piso de tierra.

(2) Vivienda en tira con patio delantero y servicio

(3) Vivienda en tira sobre línea municipal

(4) Vivienda en “L”

(5) Vivienda en “U”


Ejemplo de vivienda excavada

La presente vivienda es el resultado de la investigación arqueológica de Carolina Rivet. La vivienda se ubicaba frente a la plaza principal en la esquina noreste, por lo que se infiere que pertenecía a un vecino de importancia. Responde a la tipología de vivienda lineal sobre línea municipal. El volumen, de 26 metros de largo y 6 de ancho, se dividía en tres recintos. Se plantea hipotéticamente la existencia de una galería a lo largo de la cara norte. Se encontraron evidencias arqueológicas que permiten determinar que los cimientos eran de piedra bola, los muros de adobe y en algunos sectores de ladrillos y el techo cubierto de tejas. Dispuesto en forma perpendicular hacia el lado izquierdo del volumen principal se encontraba un segundo volumen, de 16 por 5,5 metros, cuyas características indicarían que estaba destinado a contener en un único espacio a las actividades relacionadas al servicio: depósito, cocina, dormitorio de la servidumbre. El patio principal queda delimitado espacialmente por ambos volúmenes y la medianera. Se infiere que en el fondo del solar habrían tenido huertas, árboles frutales y corrales.

Créditos

Autores
Mirta María Peluffo

Rául Fernando Ajmat

José Domingo Sandoval

Sofía Roca Ferreyra
Modelado
Mirta María Peluffo

Sofía Roca Ferreyra

Facundo Vázquez

Javier Ruiz
Renderizado
Facundo Vázquez

Javier Ruiz
Diseño y Programación Web
Eduardo Peluffo
Agradecimientos

Los autores agradecen el financiamiento de los proyectos PIUNT E601 "Nuevas tecnologías aplicadas a la exhibición y preservación del patrimonio cultural material en instituciones públicas"; “Las dimensiones de la iluminación: el desafío tecnológico y los problemas de la interacción de la luz con el ser humano, los materiales y el ambiente” Proyecto Institucional del Instituto de Investigación en Luz, Ambiente y Visión; PICT 1259 “Condiciones ambientales en museos, uso de nuevas tecnologías en el cuidado del patrimonio” y PIUNT B501 “Efectos de la radiación y las condiciones ambientales en la exhibición y preservación del Patrimonio de Museos”; y el apoyo constante del Instituto de Investigación en Luz, Ambiente y Visión (CONICET), el Departamento de Luminotecnia, Luz y Visión "Ing. Herberto C. Bühler", la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología, la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Tucumán y la Dirección de Patrimonio Cultural del Ente Cultural Tucumán.


Bibliografía


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Tellez Castañeda. (1997). Catálogo de Monumentos Nacionales de Colombia. Época Colonial. Ministerio de Cultura.

Informantes Claves

Teresa Piossek Prebisch Licenciada en Lengua y Literatura Inglesa, en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNT. Historiadora. Autora del libro “La ciudad en Ibatín - la primera San Miguel de Tucumán: 1565-1685".

Mirta Sosa Arquitecta. Especialista en arquitectura y construcción con tierra.

Luis Monti Arqueólogo. Tesis de Grado “Relación entre el espacio social y el espacio sagrado a través de los entierros en las Iglesias de la ciudad de Ibatín (1565 - 1685)”.

Ricardo Viola Arquitecto. Historiador. Director de Obra e Infraestructura Turística del Ente Tucumán Turismo. Autor del libro “Templos Católicos de Tucumán”.